En la semana del 13 al 17 de mayo de 2024, Cobre Panamá se ha sometido a la 9° auditoría externa en su fase de campo que, tras una revisión exhaustiva de las evidencias documentales, se completará con la rendición de los informes correspondientes al Estado panameño, como parte del cumplimiento de sus compromisos establecidos en el Estudio de Impacto Ambiental (EsIA), Categoría III.
Una consultora nacional acreditada por Ministerio de Ambiente y con apoyo de profesionales nacionales e internacionales con vasta experiencia en minería, procesos, gestión hídrica, ambiente, seguridad y social, es la encargada de evaluar el cumplimiento de los 371 compromisos del EsIA III.
Las rigurosas auditorías externas e independientes, que se realizan cada seis meses, han permitido a Cobre Panamá mantener los más altos estándares de prácticas mineras modernas y sostenibles.
En la última auditoria del 2023, se logró el 100% de cumplimiento del desempeño socioambiental.
En esta ocasión, los auditores evaluaron y verificaron el cumplimiento de los componentes ambientales, sociales y de seguridad del Plan de Preservación y Gestión Segura (PGS).
Es importante evidenciar los actuales factores de riesgo para los trabajadores, el ambiente y las comunidades vecinas, como lo son: el concentrado de cobre almacenado desde octubre de 2023, cuya temperatura está aumentando y su prolongado almacenamiento provocaría la generación de gases nocivos; la reactivación de la planta de energía para realizar las actividades necesarias para salvaguardar la integridad física y química de la mina; el manejo óptimo y seguro de la Instalación de Manejo de Relaves (IMR) y del tajo de Botija.
Las pruebas científicas y técnicas son determinantes para tomar las decisiones correctas que eviten afectaciones ambientales. Cobre Panamá continua adelante con la gestión responsable y segura de las instalaciones.